Si decides empezar tu proceso psicológico conmigo, estoy segura que te apetecerá conocerme un poquito antes de que tengamos la primera sesión, ¿verdad?.
Me llamo Verónica, soy de una ciudad pequeñita cercana a Madrid, vivo con mi marido y mis dos hijos y tengo la suerte de trabajar de lo que ha sido mi vocación desde que era adolescente.
Una época difícil de mi vida hizo que con 15 años tuviera problemas de ansiedad y me pusiera en manos de un psicólogo. Fue tan bonito y gratificante sentir en primera persona la ayuda que la psicoterapia te puede brindar, que ahí decidí que yo también me dedicaría a ayudar a las personas en momentos difíciles de su vida. Que también brindaría a mis pacientes un lugar seguro dónde pudieran expresarse sin juicios, donde acompañarlos desde el cariño y la empatía hacia el autodescubrimiento y el bienestar emocional.
Mi pasión por la psicología, mi curiosidad innata y querer brindar una ayuda psicológica de calidad, me ha llevado a poner parte de mi energía diaria en la formación continua desde que empecé a trabajar de psicóloga sanitaria hace más de 12 años.
Formaciones en distintas corrientes psicológicas han hecho que mi manera de entender la salud mental sea integradora, atendiendo de manera global a lo cognitivo, lo emocional, lo corporal y lo relacional, adaptando todas las herramientas que he ido adquiriendo a lo que la persona que acude a mí necesita.
Además de todos los conocimientos y habilidades que he ido adquiriendo, tengo como pilar principal en el desempeño de mi trabajo, la humanidad en mi relación con los demás. Un trato cercano, amable y empático posibilita la autenticidad y la apertura emocional, y solo desde ahí podremos trabajar en profundidad, con técnicas avaladas por la ciencia, todas las dimensiones de la persona.
“Conozca todas las teorías, domine todas las técnicas, pero al tocar un alma humana sea apenas otra alma humana.”
C. Jung